Finta al hombre del tiempo

Como no podía ser de otro modo...el frío tenía que llegar tarde o temprano (este año ha sido, más bien, tarde). Aunque claro...frío, frío...lo que se dice frío...tampoco tenemos.
Si bien desde mi ventana aún puedo admirar ese último suspiro en forma de nieve, en lo alto de la sierra de Aitana.

                                          




 La temperatura es de 13º, y aunque en la calle llovizna, es agradable pasear bajo el paraguas.

Ya estamos en marzo, atrás quedó ese 2 de Febrero que con sus floridos almendros nos indica que lo peor ya ha pasado...bueno...pues va ser que no! Ahora empieza lo "bueno".  O lo malo, según se mire.
Ahora que ya alargan los días, que a las siete de la tarde aún hay claridad, ahora que apetece salir corriendo de compras y llevarse todo lo de la "nueva temporada", en tonos pastel, va y nieva!



Pero es así y (casi) siempre lo ha sido: en marzo, incluso a finales, nieva en esta zona.
Soy consciente del privilegio de vivir aquí:  por el número de días  de sol al año y por sus suaves temperaturas. También soy consciente del "fretorro" y mal tiempo que han tenido en el resto de  España, pero es que este año....aquí no ha habido invierno hasta marzo!

Recuerdo el año pasado, el eterno febrero de estufa y manta eléctrica debido a una dolencia en mi espalda (estuve 1 mes entero de baja), y claro , este febrero de 18º de máximas....nos ha engañado a todos. El tiempo nos ha hecho una finta y ahora nos viene el frío que deberíamos haber pasado ya.

Y con este "frío", ¿qué mejor que una deliciosa y templada tarta de manzana?

La tarta de manzana es a la repostería, lo que la paella a la cocina: hay tantas versiones como gustos. Por eso hay que probarlas todas hasta encontrar la que más nos satisfaga

Por ejemplo: a unos le encanta el hojaldre, a otros les apasiona la masa quebrada y a otros les gusta la masa de bizcocho... pero siempre con manzana. 



Tarta de manzana 2.0

o lo que es lo mismo:

Pastel de manzana de Normandía
(del  libro Pastelería en tres pasos de Florence Edelman)

Utensilios: 1 molde de 20-22cm, 1 bol, una espátula y  papel de hornear

Ingredientes:

- 200gr de harina
- 5gr de levadura Royal
- 250gr de azúcar (separado 150gr y 100gr)
- 1cta de  azúcar vainillado o  de extracto de vainilla
- una pizca de sal
- 3 huevos
- 140gr de mantequilla derretida ( separado 60gr y 80gr)
- 60ml de leche
- 5 manzanas peladas y laminadas

Elaboración:

Precalentar el horno a 170º. Untar el molde con mantequilla. Recortar un círculo, del tamaño del molde, de papel de hornear. Untar la superficie del papel y enharinar todo el molde.

Tamizar la harina con la levadura en un bol. Añadir 150gr de  azúcar y la sal y mezclar bien.

                                                    Añadir dos huevos batidos,

                           agregar 60gr de la mantequilla derretida, la leche y la vainilla.

                                            

                                         Mezclar hasta que la masa sea homogénea.

                                                           Pelar y trocear tres manzanas

                                 y añadirlas a la mezcla sin romperlas demasiado.

                                                          verter la masa en el molde.

Pelar y laminar las dos manzanas restantes y decorar la tarta con dos círculos concéntricos.

Introducir en el horno y hornear durante 20 minutos.


Preparar mientras la crema. Para ello derretimos el resto de la mantequilla (80gr). Mezclar con los 100gr de azúcar restantes y añadir el huevo restante,  batido.

Una vez transcurridos los 20 minutos,  abrir el horno y verter la crema sobre el pastel.

Hornear durante 30 minutos más o menos. Ir comprobando con un palito si está bien cocido.

Una vez esté listo, retirar del horno y dejar enfriar en el propio molde durante 20 minutos. A continuación lo desmoldamos y ya está listo para consumir.

Este pastel está rico aun tibio, pero lo puedes tomar  también frío.

Si te gusta la canela, le puedes poner 1/2 cta en la masa, tamizada junto con la harina.


Este pastel de manzana es una excusa perfecta para quedar con los amigos y merendar, sobre todo en un día como este que invita a estar en casa.


Bueno mientras esperamos que el tiempo se aclare (ahora frío, ahora calor), lo mejor es aprovechar para ir viendo qué tenemos en los armarios para el cambio de estación. Pero... ya sabéis lo que dice el refrán: "Hasta el cuarenta de mayo no te quites el sayo", no corramos a ponernos ropita de verano, de golpe y pillemos un resfriado.

Hasta el próximo dulce y..

Bon profit!